sábado, diciembre 19, 2015

Le sang et la neige

La neige et le sang

No insistas, no pisaré esa rosa .Ayer mismo la rosa carecía de pétalos y  espinas. Era sólo una rosa.

Ayer mismo , esa rosa apartada del camino se caía en el río .

 No recibo muchas rosas estos días ni recuerdo los días en que llovían las rosas en mi ventana, azules y amarillas, rojas y negras , moradas.

Ayer mismo, esa rosa no tenía fragancia, era sólo una rosa.

Poco a poco le fui poniendo nombres. Flor -le dije- flor tú nunca me abandonas. Y la rosa soltó un pétalo morado. Flor -le dije- te voy a llevar a ver el mar.


Viajamos hasta el mar y la rosa soltó  otro pétalo del color de la espuma. Las cosas no iban bien pero la rosa era ya parte de todos los océanos.

Flor, le dije- si sacas las espinas y me pincho mi sangre roja caerá sobre la nieve; ya ocurrió en otros tiempos. No hay nada inmaculado flor, nada tan blanco que no pueda mancharse-.

Flor ,le dije _te llevaré a ver mi grieta que sangra con mi dedo en la espina y volverás a ser rosa-.


No insistas no pisaré esa rosa. Si me la arrancas dejará de ser rosa para convertirse en una triste rosa perdida , en una rosa más que no tenía nombre, que no tenía pétalos, que no tenía espinas.

No hay comentarios: