martes, junio 19, 2007

LA TEMPLANZA


En las complicadas y tediosas relaciones de oficina siempre surgen algunas complicaciones extrañas y yo siempre me siento ajena es decir alienada enajenada extrañada perpleja y últimamente ya aburrida de las rencillas y rumores de los oficinistas entre los que me encuentro. Mi posición en el mundo es neutra prácticamente podría un día dejar de existir y quizás nadie repararía en ello. Esta neutralidad me da la libertad del que no pierde ni gana ni tampoco nada con la corriente. Me acuerdo de Gregorio Samsa y muchas veces me siento escarabajo y otras hormiga trabajadora o araña tejiendo el hilo de Ariadna de mi propio destino. Sin embargo cuando estás ocupada en tus cosas te asalta el rumor, la maledicencia y a veces la injuria. Yo trato de zafarme se no inmiscuirme estoy aquí de casualidad. Aquí sólo represento a una de mis cartas favoritas del tarot la templanza que saca agua de una copa para verterla en otra y por último la vacía en un pozo. No me digas nada observa que mi rostro está cansado que comprendo todas las debilidades que hago míos todos los defectos. Pretendo que la rutina no me arrastre, pretendo seguir siendo sólo eso templanza, sólo eso nada y más. Veo como el mundo a mi alrededor se enaltece, se humilla, se retuerce, muestra su lado más oscuro. Observo el pasar de los días a través de esta pantalla y constantemente el reloj me recuerda que el tiempo de ser templanza es sólo eso tiempo y no importa malgastarlo por un puñado de monedas siempre y cuando no te alcance el tren de la ignominia.

miércoles, junio 06, 2007

Pregunta ¿De dónde viene la alegria?


¿De dónde viene la alegria?
la alegría no es mía ni tuya
ni de nadie
no me dieron un premio
ni un beso
ni dijeron has sido buena
hoy
la alegría era suya
iba por libre
a su manera
sin causa sin motivo
leí que San Ignacio
dice que la alegría es de Dios
no viene de las recompensas ni los números
ni siquiera se debe a complicadas explicaciones bioquímicas
la alegría viene así de pronto
con la brisa de la mañana
y estás solo
y sólo el viento
mueve tu ventana
pero hay alegría en tu corazón