lunes, marzo 19, 2018

J.S. Bach - St. Matthew Passion, BWV 244, Part I (Enoch zu Guttenberg)





LA PASIÓN SEGÚN SAN MATEO DE J.S. BACH TIENE EFECTOS PRODIGIOSOS 

Alvaro Marías encabezaba su artículo  en El programa de mano de Ibermúsica del concierto del 18 de marzo, con una cita de Cioran:

SI ALGUIEN LE DEBE TODO A BACH ESTE ES DIOS.

Ayer asistimos emocionados a uno de los milagros , de los prodigios de la música en directo. Y no lo digo como entendida sino como simple aficionada. La Pasión según San Mateo de Bach casi logra enmudecer  ayer  a la cofradía de los tísicos y a la  hermandad de los caramelos cuidadosamente envueltos en papel de celofán.
Enoch Zu Guttenberg y la Orchester und Chor der Klarverwaltung Müncher Knabenchor ofrecieron una version espiritual, impecable prodigiosa de la Pasión según San Mateo de Bach.Todo se sucedía prodigiosamente perfecto era tal el sentimiento y la espíritualidad que desprendían que me sentí levitar sobre mi asiento como ese cura de Macondo que lo hacía al tomar chocolate.
En esa obra está contenida toda una cosmovisión, una manera de aproximarse al mundo llena de grandeza  de amor, un lección de arte filosofía, piedad, caridad, y espiritualidad con consistencia con peso y al mismo tiempo absolutamente evanescente. El fraseado los recitativos aún en una lengua casi extraña para mí, aún ininteligibles nos comunicaban con ese otro, y enlazaban los coros y las voces que iban contando la historia más hermosa que jamás se ha escrito del libro de los libros. Occidente sin dogmatismo, sin imposiciones, tienen en su acervo joyas cómo ésta que nos devuelve lo que somos o  al menos lo que deberíamos ser.

Si calláramos más, sí dejásemos de vociferar y proferir banalidades, insultos, naderías, si nos recogiéramos alguna que otra vez y escucháramos obras com ésta entenderíamos quiénes somos, seres humanos capaces de la mayor de las grandezas: la misericordia, la caridad , la devoción. Personas a las que se nos quiere borrar la memoria y quitar la paz. Todo eso y mucho más bulle todavía hoy en mi al escuchar esa maravillosa versión de la obra monumental de J.S. BACH.